martes, 25 de enero de 2011

Atrévete.

Muchas personas piensan que el amor no es nada, que solo trae malos momentos, comeduras de cabeza y malos recuerdos. Ahora mismo no hay ninguna pareja en el mundo igual a otra, todas las parejas son unas diferentes a otras, cada uno tiene su forma de ver las cosas y por ello a veces hay problemas.Yo, pienso que todas esas personas no han encontrado a su media naranja, que no saben que se siente al verlo, al estar delante suya y no saber como reaccionar, qué decir para no parecer estúpida, notar como tu corazón se agita y pensar por un segundo, que te va a estallar. Ponerte mucho más que nerviosa al verlo, ver como te sale la sonrisita tonta en cuanto lo nombran y cuando hablas de él te brillan los ojos, el corazón se te agita, no sabes qué decir para ser precisa con tus palabras y sientes como si todo tu mundo se redujera a él.
A todas esas personas que no siente admiración por el amor, decirles que no saben lo que se pierden. El amor es algo único, que a veces nos deja ciegos,sí, pero nos transporta a otra dimensión donde en muchas ocasiones todo es de color rosa, y otras algo menos rosa. Pero con todo eso merece la pena apostar, atreverse, intentar ver lo que sucederá, a probar. Como bien dice el refrán "quien no apuesta no gana", es mejor apostar y coger el tren que quedarte de brazos cruzados en la estación viendo como pasa. Todo en esa vida ocurre, pero a veces solo sucede una vez, por ello es mejor arriesgarse, dejar todo atrás y centrarse en lo que ves, mirar hacia adelante en esa única dirección. Súbete y atrévete a vivir, en definitiva el amor se resume en eso.


miércoles, 19 de enero de 2011

Amigos.

Nos caemos "n" número de veces, pero al igual que te caes, te levantas. Gracias al apoyo familiar, a los amigos, los conocidos, las situaciones y como no, a esas personas que sin saber cómo te aportan confianza en ti misma, así hay algo que te hace volver, levantar la cabeza y mirar hacia arriba, a poner las manos en el suelo, flexionar las rodillas, colocarte bien el pelo y levantarte con la cabeza bien alta, mirando hacia un punto fijo, sin darle importancia a los comentarios de los demás, al fin y al cabo solo importa tu opinión y los seres más cercanos y estoy segura de que estarán pase lo que pase. Y cuando vuelves a tu vida, sí a esa que dejaste apartada, o bien por él, por una enfermedad, por múltiples motivos...Y ves como te regalan diariamente sonrisas, miradas,todo eso te va devolviendo la sonrisa, ese brillo en los ojos que antes no tenías, esa ilusión por volver a sentirte guapa, sientes de nuevo que la gente está ahí y que hay vida detrás de todo el mal rato pasado. Es como si te pusieran una inyección de vitalidad. Porque en momentos en los que necesitas a personas ahí, las tienes, y solo por ello deberíamos saber valorarlo, darle más apreciarlo, saber sonreirles siempre, no me refiero a estar todo el día con una sonrisa pintada en la cara, simplemente a poder mirar con simpatía, cuidar a quienes te cuidan... Y así estos se quedarán a tu lado, por muchísimo tiempo, y diré una cosa "quien tiene un amigo tiene un tesoro".

jueves, 13 de enero de 2011

Adelante.

Cuando todo se te viene encima, y ya no sabes para donde mirar, como reaccionar, qué hacer... Entonces aparece una luz, una luz muy débil, pero que poco a poco con el tiempo va formándose una luz cegadora, de tal forma que ese agobio que tenías desaparece, antes todo era negro y ahora la luz te ciega. Ves la puerta por donde has de salir y corres a cruzarla, se abre sola y ahí estás, a punto de cruzar todos tus recuerdos, dejando atrás un sentimiento pero a su vez avanzando hacia muchos otros. A miles de nuevas experiencias a miles de momentos mejores y más entrañables, a alejarse de todo para poder continuar.
Hay que saber cruzar esa puerta y dejarse iluminar por la luz, porque quieras o no es la que te abrirá los ojos y no te quedas estancada en un momento concreto, puedes avanzar. ¿No es lo siempre se dice? Avanzar en definitiva es saber apreciar las cosas de la vida, pasar por momentos que hagan que tu vida no sea monótona, aburrida o simplemente no te limites a un solo momento. 



miércoles, 12 de enero de 2011

Inolvidable.

A veces hay momentos en los que te paras a pensar, en todo lo vivido en el pasado en todos aquellos recuerdos que por diversos motivos vamos dejando atrás. Al recordarlo lo vemos de una forma diferente a la que veíamos en ese momento y nos invaden muchas emociones acumuladas semanas tras semanas, meses tras meses, o quizás años. De todas formas al recordarlos nos hace recapacitar, nos damos cuenta de hechos que no supimos valorar, de compromisos que no supimos aceptar, sentimos añoranza, a veces nos decepcionamos a nosotros mismos… Pero lo que siempre nos hace recapacitar no es que alguien te diga "oye te has pasado", si no que ese mismo hecho te incomode, te sientas mal tú misma y entonces sí te haces recapacitar e intentas ponerle solución de otras formas posibles hasta que das con la solución adecuada, por una sola razón porque te importa.

Tres metros sobre el cielo

Tres metros sobre el cielo es la primera novela del escritor Federico Moccia llevada al cine. Tiene lugar en Roma, donde un grupo de adolescente. Las chicas como Babi se esmeran en sus estudios, hablan del último grito en moda y se preparan para encontrar al amor de sus vidas, sin embargo, los chicos como Step prefieren la velocidad, la violencia, el riesgo, las motos y la camaradería de las bandas, pero todos ellos se implican en la vida como si cada segundo fuera el último. Pertenecen a mundos distintos, desean cosas distintas pero tienen algo en común: el amor que sentirán él uno por el otro les hará volar y sostenerse. Este mismo amor le lllvará a descubrir nuevas situaciones y cambiar: ellas se volverán más salvajes; ellos más tiernos. Mientras, allí abajo, la vida real ya les reclama.

Desde mi punto de vista es una película que recomiendo ver, me parece realmente buena. Muestra el amor entre dos personas de mundos muy diferentes pero que finalmente pueden mantener una relación llena de pasión y diversión.