sábado, 5 de noviembre de 2011

Una unidad no un conjunto.

La amistad, la verdad y bondadosa amistad. De lo mejor si es buena, de lo peor si es mala. Una sensación bellísima la de estar rodeados de amigos, siempre con sonrisas en las caras, dibujadas ahí en cuanto te ven, siempre dispuestas a salir por ti y siempre ahí cuando las necesitas.
Miradas entregadas, risueñas, carismáticas, verdaderas, buenas... Que están ahí siempre cuando tu las quieras utilizar, que te están diciendo "tú puedes", "adelante" y te dan esa justa confianza cuando la necesitas.
Recuerdo días y días junto a tus amigos, dejándote las ganas ahí por ellos, para que todos estén bien. Vuelvo la cabeza atrás y tan solo veo buenos recuerdos, carcajadas enormes, besos, abrazos... En definitiva simplemente buenos amigos, por los que hoy sin duda daría lo que fuese, por ellos, ya que son ellos los que día tras día me demuestran que están aquí por mi, para escuchar mis "problemas" de una niña de 15 años, que si estás mal ellos caen contigo, para sonreírme cuando lo necesito, para hacer de tal manera el tonto que el día más triste se convierta en el más afortunado, para callarse cuando no puedo más, para entenderme siempre, para echarme una mirada cómplice cuando tengo que decir algo sin poder decirlo,para pasarme la mano por encima del hombre o cogerme por la cintura y simplemente sonreírme, para estar ahí, conmigo. Sencillamente porque así son los amigos y así deberían serlo. Una unidad no un conjunto. Tan solo amigos que no les importa pasar de hacer algo para estar contigo, amigos para tomar una copa hay de sobra, pero amigos de verdad, de los que siempre van a estar ahí, y que cuándo te lo dicen lo hacen de corazón, de verdad, ¿hay de  ese tipo, en realidad? Ahora mismo pocos, pero por algunos de ellos lo dejaría todo si estuviesen mal y ellos saben a la perfección quienes pueden contar conmigo ahora y siempre que quieran, porque si algo se, es que no soy de ese tipo de personas que dicen si si "siempre" y luego es "a veces" o "raramente". Solo importa quienes te quieren y a quienes quieres, ahí es dónde está la verdadera cuestión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario